miércoles, 13 de agosto de 2014


 
LA TECNOLOGIA Y EL FUTBOL
 
Por Carlos F Ramírez
 
Quienes  me conocen (especialmente mis hijos) saben que mi vida en el deporte se ha repartido en partes más o menos iguales, entre el “football  association” y el “base ball”.  Combinación  poco común, que me ha valido más que unas cuantas discusiones amigables y alegres con mi querido amigo, el periodista inglés y brillante experto del fútbol, Keir Radnedge.
 
En una ocasión, no hace mucho tiempo, insistí con Keir que tarde o temprano el fútbol tendría que imitar los avances tecnológicos del beisbol de las Ligas Mayores.
Hablamos del uso de la televisión para aclarar dudas en las decisiones arbitrales; y aunque  insistió que el fútbol era un juego de velocidad y el beisbol tenía más pausas que daban tiempo para  pensar antes de actuar (y tenía razón), le hice ver  que el fútbol  tendría que aceptar tarde o temprano que el “ojo del espectador”en el fútbol asociación  por la rapidez del juego, se engaña  más fácilmente que en otros deportes.
 
Ahora, vivimos   una especie de cruzada (que encabeza Keir Radnedge) para convencer a FIFA que se utllicen más medios electrónicos para ayudar a decisiones arbitrales.  Al primero que hay que convencer es al Sr. Blatter (si es que lo reeligen), que cuando menos ha ido aceptando pequeños cambios al reglamento.  Pero definitivamente debe darse al  árbitro la posibilidad de ver la repetición de ciertas jugadas ante una decision difícil. Así, podrían prevenirse  ciertos errores del ojo humano, que nunca será tan rápido como se necesita para seguir las acciones de  un juego de la velocidad como se juega  el fútbol. 
 
Uno de estos ejemplos fue el penalti que le marcaron a México en el decisivo partido de la Ronda de 16 contra  Holanda, cuando con solo ver la repetición fue evidente que ni la mano ni el pie de Márquez fueron usados con la intención de bloquear o derribara Arjen Robben;  además este ultimo jugador debió haber sido expulsado antes porque previamente fingió faltas contra el árbitro en dos ocasiones y no fue amonestado por el silbante.
 
La base lógica de este cambio, sería que el fútbol actual, con las formaciones de cinco defensores atrás (la famosa línea de cinco), y un exceso de contragolpes y carreras hacia la pelota, hace dificil y hasta imposible para un silbante seguir los detalles del juego.  Esta fue la razón  por la cual (aún cuando no se compara su velocidad con la del fútbol) el beisbol de las Mayores cambió sus reglas, y pienso que muy seriamente FIFA debe revisar las suyas,  o cuando menos cambiar la perspectiva de cómo el árbitro sigue los movimientos de un deporte que ha aumentado en rapidez y aglomeración de jugadores en ciertos sectores del campo.   Los dos ojos de un silbante tienen  dificultades para seguir en detalle todas esas acciones. 



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